El Padre Carlos Cancelado, de origen colombiano quien lleva su ministerio en Chilapa Nayarit, comparte la experiencia de lo que una vidente de nombre Oliva vio del infierno en revelaciones privadas, las cuales aún son estudiadas, sin embargo, nos han mostrado de una manera explícita, lo que es morir eternamente por el pecado. El padre Carlos platica en sus homilías, que esta beata mujer fue preparada por el mismo Cristo nuestro Señor un tiempo, antes de entrar en el infierno, a lo cual, menciona Oliva, que de no ser por la presencia del Señor ella hubiera muerto de espanto. De hecho, en este tipo de manifestaciones, no sería a la primera persona a quien Dios le muestre el infierno, de cierta manera también lo hizo con San Juan Bosco, por ejemplo, y a otros santos, María Santísima también lo hizo mostrando el infierno a los tres pastorcitos en Fátima Portugal.

Y así, como si se tratara del libro de la Divina Comedia escrito por Dante Alighieri, esta mujer explica los tormentos que un alma condenada sufre, esto según el pecado que mantuvo dominada en vida a esta pobre alma, pero esta vez no se trata de un libro ficticio, se trata de una realidad, por lo mismo me referiré al estado del adulterio en este artículo.

El Padre explica que, cuando Oliva ve en el infiero una masa de cuerpos monstruosamente adheridos como si se tratase de una sola cosa con diferentes rostros, brazos y piernas envuelta en llamas de dolor, pregunta al Señor qué es eso tan terrible, y Jesús le explica que son los adúlteros, aquellos que prefirieron vivir sus pasiones con desenfreno, pues así como el matrimonio une dos cuerpos con la bendición de Dios, y por este mismo sacramento son ya una sola carne y una sola persona con una exquisita belleza sobrenatural, claro está, en un estado de santidad, de la misma manera, el adultero al unirse a otro cuerpo que no le pertenece queda espiritualmente adherido, y es así como va formándose esa masa deforme en el pecado de fornicación, y lo que vio esta mujer fue aquellos que cometieron adulterio con varias personas, si ya dos personas pegadas ardiendo eternamente ya es terrible solo de imaginarlo, ahora más de dos, es inconcebible. Esto lo explica el Padre Carlos para que podamos sumergirnos un poco en lo que es la espiritualidad del matrimonio y la importancia de la fidelidad.

Lo que acabo de mencionarles es porque debemos entender la respuesta que en seguida comparto al titulo de este artículo ¿Puedo tener relaciones sexuales con mi esposo(a) aun sabiendo que tiene amante? Y la respuesta es un NO contundente y lo explico a detalle.

Podrías decir: Es mi esposo(a) tengo derecho, o, si lo hace con otra(o) conmigo también que soy su esposo(a), o esta frase que algunos sacerdotes usan con el afán de buscar la santidad en el matrimonio y la unidad aun sabiendo que la otra parte vive en pecado de adulterio: Tú deber es estar con él, negarte es pecado. Sí, negarse al acto sexual conyugal es pecado cuando no hay un impedimento para ello como lo es el adulterio; el problema es entender primero, que el matrimonio tiene su propia espiritualidad, la cual, al verse afectada por el pecado, directa y principalmente por el adulterio, daña de manera profunda al mismo, por lo tanto, si el matrimonio tiene su propia espiritualidad y esta es dañada y mal formada con el acto del adulterio, de cierta manera al unirse al cónyuge que no ha cometido adulterio lo contamina no del pecado de adulterio, pues el pecado es personal, y corresponde a la espiritualidad individual de cada persona, la contaminación es de manera demoniaca, y aquella espiritualidad hermosa en estado de gracia por el sacramento, se afea, puesto que ya lleva otro rostro y cuerpo unido a esta por el pecado, y, lo que además sucede, es que la otra parte comienza a experimentar lujuria y amor enfermizo por los celos que, no hace otra cosa que vivir endiosado(a) por el cónyuge creyendo que cometiendo actos sexuales animalizados regresará  su hombre o mujer como si solo el apecto sexual los mantuviese unidos, descuidando así todas la dimensiones del matrimonio principalmente la del carácter espiritual; cabe mencionar que, precisamente, la espiritualidad del matrimonio es el arma más poderosa que tiene el mismo para sanar, liberar, purificar y santificarlo.

Dicho de otra manera, si la espiritualidad bien trabajada dentro del matrimonio santifica al mismo, deberíamos estar consientes que el pecado del adulterio destruye esa espiritualidad y que un acto sexual entre esposos cuando alguno de los dos vive en pecado de adulterio afecta directamente a su cónyuge; esto a lo que corresponde a la espiritualidad, ahora bien, la respuesta sigue siendo un NO si lo vemos por la parte física, puesto que el adúltero generalmente no se cuida al tener contacto sexual con otra persona, y puede contagiar de alguna enfermedad de transmisión sexual ya sea leve o una infección de algún virus mortal a su cónyuge; y por el aspecto de la dignidad que Dios da a cada ser humano, uno debe de decidir amarse de tal manera de no dejarse usar por la parte adultera puesto que el acto conyugal debe tener tres aspectos: Acto libre y voluntario, por amor de ambas partes y estar abierto a la vida, si alguno de estos tres aspectos no existe, el acto sexual no santifica al matrimonio pero en absoluto, aspectos que quedan completamente dañados cuando alguno de los dos está en pecado de adulterio, pues se convierte en un acto de egoísmo al solo hacerlo por placer.

Ahora bien, si estamos hablando del aspecto espiritual del matrimonio ¿Cómo se puede revertir el daño causado a la espiritualidad del mismo?

Es interesante lo que debemos comprender a cerca de lo que afecta el adulterio en cada uno de los aspectos y dimensiones del matrimonio y por citar algunos: La espiritual, la psicológica, la emocional, la económica, la física y por supuesto la familiar principalmente a los hijos si los hay, el pecado es tan grande como el daño que se causa, y no por el hecho de mantenerlo en secreto no significa que haya un daño menor, de ninguna manera, ante lo que un cinismo descarado pudiera manifestarse, la mentira y traición no es menor gravedad, por más escondido que sean estos actos.

Al estar conscientes de lo que el pecado del adulterio ocasiona y también comprender la espiritualidad del mismo, entonces sabremos que solo a través del lazo sacramental es como podremos trabajar la espiritualidad del matrimonio y revertir el daño, es decir, ya me di cuenta que el matrimonio tiene su propia espiritualidad, misma que es adquirida por medio del sacramento, el cual es una fuente o canal de gracias para santificar el matrimonio, y también descubrimos cómo afecta el pecado del adulterio, cómo deforma la espiritualidad por tratarse de una sola carne y una sola persona, queda claro que lo último que debemos hacer es tener relaciones sexuales, y para ello, debemos comenzar a trabajar nuestra propia espiritualidad, para tener el valor de saber entregar a nuestro cónyuge a Dios en cuerpo y alma para que él lo transforme y sane la espiritualidad del matrimonio.

Pareciera un poco complicado esto, sin embargo, es un proceso, es darme cuenta de lo que no debo hacer, no debo tener relaciones sexuales con mi cónyuge si está en pecado de adulterio por todo lo antes mencionado, debo trabajar mi propia espiritualidad ¿Cómo? Comenzar una vida de oración, como cada atleta debe tener una rutina y ejercitase para lograr ver torneado su cuerpo y estar en perfecta condición, así también el alma se ejercita con una rutina espiritual: Hacer oración en todo momento, si estoy en la escuela, en el trabajo etc., orar no significa rezar, un simple ofrecimiento de obras basta para empezar, todo por ti Jesús mío, por ejemplo, es caminar con los pies en la tierra y con el corazón y la mente en el cielo, unir mi vida y mis obras a mi Creador, esto me ayudará no solo al acercamiento y al contacto con Dios, sino que, además me hará descubrir que soy eterno y que voy de paso por esta tierra, en este mundo, esto me ayudará también a cuidar mis actos, no solo el no pecar, sino el de hacer cosas agradables ante Dios como obras de misericordia, comenzando también con dos al día, o sea la caridad hacia mi prójimo, podría ser, desde tenerle paciencia y escucharlo hasta darle de comer o unas monedas para que se ayude, uno sabe cuándo y hasta dónde puede dar de su tiempo y de su amor.

Ir a visitar a nuestro Padre Dios en el sagrario o expuesto, simplemente visitar al Santísimo, hay personas que le aburre entrar en este santuario sagrado por la falta de comunicación con él, o no creen que de verdad esté en cuerpo y alma en un pedazo de pan u oblea, y para esto te invito a ver milagros eucarísticos a través de internet, y darte cuenta que de verdad ahí está él desde la institución de la eucaristía, leer capítulo 6 del evangelio según San Juan, de verdad, si creyéramos que Dios está ahí,  habría colas interminables para entrar a visitarlo todos los días como si se tratase del miércoles de ceniza; comienza por cinco minutos al día, y después con forme tu espíritu te lo vaya pidiendo aumenta el tiempo hasta que logres visitarlo diario por lo menos una hora, esto te va a servir como no te imaginas, puesto que las gracias obtenidas por visitar a tu Padre son infinitas, simplemente te cambian la vida.

La eucaristía diaria o frecuente, ¿Cuántos domingos tiene el mes? Cuatro, ¿Cuántos días tiene el mes? Treinta o treinta y uno, si comulgáramos todos los día la diferencia es abismal, y solo el que se alimenta de la carne y del cuerpo de nuestro Señor Jesucristo tendrá vida en abundancia, convertirse en un alma eucarística, es ser un alma distinguida, pues brillan como las estrellas en la bóveda celeste, además de ser la mayor protección contra el demonio, y la mejor manera de fortalecer el alma, aunque si las más perseguidas más nunca derrotadas porque satanás jamás podrá contra un espíritu en el que habita Dios en cuerpo y alma, así como lo dijo San Pablo: Vivo más no vivo yo, es Cristo quien vive en mí Gálatas 2,20.

El rezo del santo rosario diario, ¿No tienes la devoción de rezarlo? Comienza con un misterio diario, después reza un misterio en la mañana, otro por la tarde y uno antes de dormir, hasta que logres rezar los cinco misterios al día aunque sea en pausas, la idea es generar un diálogo de amor entre nuestra Madre y tú, pues ella es la mejor intercesora, no reces nunca ni por equivocación de prisa, este no es un diálogo, es solo cumplir la cuota de rezo, esto no vivifica para nada al espíritu, reza como si estuvieses platicando, tranquilo y sin prisas, el santo rosario es una arma perfecta contra satanás, donde mencionas a María el demonio huye, además el santo rosario tiene sus propias gracias, la mayor de todas es que María siempre estará contigo y llevará tu alma al cielo, pues una persona hija del santo rosario, así como lo menciona ella, somos predestinados al cielo, entre otras gracias no menos importantes como el liberarte de cualquier vicio, esclavitud o cadena, llámese drogadicción, pornografía, alcoholismo etc.

Y por último, leer la palabra de Dios por lo menos unos cinco minutos al día para comenzar, principalmente los evangelios, pues nadie ama lo que no conoce, si ya con la visita al Santísimo comienzas una unión íntima con nuestro Padre Dios, tener presente su Palabra y sus hechos nos alentará a estar seguros de que su Palabra se cumple en nosotros también y más cuando nos sentimos debatidos, destrozados por la situación por la que pasamos en la destrucción del matrimonio a causa del adulterio generalmente, pues es cuando el nos dice que nada es imposible para Él, Lc. 1,37.

Hasta aquí, lo que se refiere a trabajar en nuestra espiritualidad, y para comenzar a trabajar la espiritualidad del matrimonio es muy parecido, pues al mismo tiempo que comenzamos a trabajar la personal, se trabaja indirectamente la matrimonial, es indispensable el perdón por muy grave que sea la falta, si no, no habrá avance alguno, tener en cuenta que nuestra principal misión es llevar a nuestro cónyuge al cielo, y con esta meta comenzar a trabajar en ello, para esto es necesario todas las prácticas espirituales ya mencionadas, con la única diferencia de que en la oración este presente siempre pedir por el cónyuge, y por su amante, puesto que esta persona no tiene el conocimiento ni el amor de Dios, y vale la sangre derramada de Cristo también, pues también es su hijo(a), has oración de entrega del esposo(a) en cuerpo y alma,  misma que debe hacerse para no vivir atados a la carne solamente, la idea es combatir al demonio de desunión matrimonial, y como somos una sola persona comenzar a utilizar las gracias por medio del lazo sacramental que me une a él o ella.

He escuchado en las asesorías que la amante es veinticinco años más joven y más bonita, podrá ser así, sin embargo, ella solo le puede dar carne, la esposa siempre será la esposa y podrá arrancarlo de las garras de del demonio por el lazo sacramental y regresarlo a su lugar, así, las mujeres y hombres inteligentes saben utilizar las gracias a su favor, siempre y cuando sean perseverantes en la oración y en las prácticas espirituales las cuales serán ofrecidas por tu cónyuge en todo momento, esto dará por consecuencia en el camino y la espera, paz y alegría en el Señor, fortaleza y ánimo, pues podrás unir tus quereres a la voluntad de Dios sin exigencias, un alma ansiosa y desesperada que exige un milagro exprés, no ha entendido la espiritualidad del matrimonio ni la personal, para construir un edificio se trabajan los cimientos primero, y estos no nos permiten ver la obra, pues trabajar los cimiento es excavar profundamente, sacar toda la tierra que estorba, hacer trazos perfectos y meter piedra firme y dura para que pueda sostener el edificio, esto es Dios, la mano de Dios sosteniendo mi edificio que es mi matrimonio y mi familia, años pueden pasar para comenzar a ver la obra vislumbrando al ras del suelo, lo que más tarda, dará mayores gracias y compensaciones, valdrá la pena la espera y la entrega en oración, un ejemplo de ello es santa Mónica, quien por su oración constante durante a cerca de 30 años logró una familia de santos, y la santidad es unión y alegría ¿Cuánto tiempo deberás de orar y rezar por tu cónyuge? Siempre, si porque está en pecado para rescatar su alma, si porque ya está a tu lado para conservar unido el matrimonio y la familia, pero la oración es toda la vida, si no estás dispuesto a ello, este artículo no es para ti, el odio, el rencor y la venganza jamás dará felicidad, bendice siempre a tu cónyuge y tú también tendrás bendiciones, maldícelo y te maldecirás a ti mismo.

Así que, por todo lo antes mencionado, no se debe tener relaciones sexuales mientras nuestro cónyuge está en pecado de adulterio, aquí viene la parte crucial de todo esto; el demonio que está separando matrimonios a nivel mundial se llama Asmodeo, (Dios le reprenda) este es cabeza ¿Qué significa esto? Que comanda una legión de demonios, el adulterio nunca viene solo, además de la lujuria el adulterio trae demonios de mentira, de impiedad e irreligiosidad, no quieren saber nada de Dios ni de la iglesia, es más, se escudan con los errores de los sacerdotes y de la gente que asistimos al templo para disculpar sus faltas, son agresivos e irrespetuosos entre otros tantos demonios, pero el principal es el demonio de la lujuria, como lo menciono al principio de este escrito, así que, este demonio se vence y domina con la virtud contraria que es la castidad y pureza, por esto mismo es necesario no tener contacto sexual con tu cónyuge puesto que tu vas a ofrecer pureza y castidad en oración por medio del lazo sacramental por tu esposo(a) de tal manera que tumbes cabeza, y se aleje Asmodeo con toda y su legión, te prometo que eso sucederá no sin antes hacerte la guerra, pero dice la palabra de Dios en la carta de Santo Santiago 4, 7 Resiste al demonio y este huirá…

No hay cosa tan repugnante para  el demonio que la pureza y la castidad, lo debilitas, lo aniquilas, por lo mismo deberás trabajar tu propia espiritualidad, no podrá contra ti, vístete de la armadura de Dios Efesios 6, 10-18 te hará bien leerlo; pues la lucha es contra espíritus no contra personas humanas, y te dejo por último esto: Tu esposo(a) no es tu enemigo(a), ámalo cuando menos lo merezca, cuando más se equivoque porque es cuando más te necesita. Dios te bendiga en esta lucha espiritual.

Santa Cecilia Flores Dueñas